En cuanto vio aquel acto, corrió hasta donde su hermano para retirarle la mano del cuello y sostenerla con la suya entrelazando sus dedos con los ajenos. Con una enorme sonrisa espero pacientemente a que la piel de aquella zona se regenerara para soltarle esperando que no lo hiciera nuevamente, o al menos no en su presencia siendo que odiaba bastante que hiciera eso.

La mirada se le perdió por unos cuantos minutos a la menor, volviendo a la realidad se acercó más a su hermano gateando hasta apegar su espalda a la ajena, acurrucándose y haciendo que este le abrazara.

— Hemos cazado bastante Onii-chan, una noche más para descansar no nos hará daño… Y tampoco perjudicará las cuentas para Muzan-sama. Y así… te devuelvo tu tela… jijiji. —

Sacrifico dos pedazos de tela que colgaban en sus brazos, pero poco le importo ahora por lo menos había calmado el llanto de la menor. El demonio de rango lunar solo frotaba su mano en la frente, resoplando aliviado por el resultado de su auxiliar idea improvisada.
De sus amarillentos y decaídos ojos no perdió ese deleitar con el brillo en la sonrisa de la hermana.

· ─ Oh bueno. . .Ya sabes. . .Pequeña improvisación, aun que ya sabes por algo soy tu hermano. ─ ·

Al escuchar lo ultimo no evito ladear su cabeza y empezar a rascarse el costado de su cuello marcando un poco la piel palida de aquel ser que solo reflejaba cierta picarda en su comisura, dibujándose una media sonrisa con el filo de sus dientes.

· ─ Je, ¿Verdad? han sido semanas agotadoras entre el Distrito y la caza, ya hacia falta un poco. . .

Sus llantos pararon en cuanto escuchó a su hermano tranquilizándola con sus palabras como era de costumbre. Frotó sus nudillos en aquellos ojos hundidos en lágrimas y bajó la cabeza para darse cuenta que su hermano había utilizado los pedazos de tela que siempre vestía en brazos para poder cubrir las partes íntimas de su hermana.

Se levantó y corrió hasta la ventana más cercana de aquella habitación y poder verse en el reflejo de esta, llevando sus manos a sus pechos para apretujarlos y modelar para ella misma. (?) Dándose media vuelta, con las manos en las caderas presumía de su nuevo atuendo.

— ¡Eres un genio Onii-chan! Se ven tan bien… Y qué va, poco me importará si nos pillan; además solo estábamos jugando… a nuestro modo; jeje.

· ─ Y luego me juzgaban por llevar esos pedazos de tela por nada...En fin. ─ · Expreso eso ultimo con un pequeño suspirar ligero, termina de atar los nudos entre los extremos de cada punta, acto seguido posaba el pie en el hombro de la menor y así empieza a jalar de ambas telas, atando en forma de una cruz en la espalda, dejando un pequeño nudo. · ─ Bien, con eso debería bastar, mucho cuidado la próxima, nos podrían pillar, aun que sinceramente...No le veo inconvenientes por si pasa. (??) ─ ·