<<+>> En aquella densa noche mezclado con las exuberantes luces del distrito. Fue entonces que escucho eso ultimo y no evito reír por lo adorable que era, solo para en aquel entonces esos actos tan deplorables e inhumanos podían verse tiernos para aquellos dos indeseables.

· ── Cuidado Daki, te veo muy energética, al menos dejame algunos, luego la gente estará rindiendote piedad con sus lagrimas cuando sepan que eres la que se cargo a la mitad de ellos. Jmjmj

Suspira aliviado, ahora que notaba que tenia mas confianza en su esfuerzo, puede notar los frutos que a dado aquel demonio con su hermana, era un progreso, por lo que era vital seguir manteniendola asi.

Solo extiende la mano para limpiar una que otra lagrima en los costados cerca de aquellos ojos. Espero un momento hasta que el tejido volviera a universa con el otro extremo del cuello, mientras escucha una sonrisa de media luna se dibuja en el pálido, afirmando orgullosamente.

· ── Te dije que podías nee-chan, solo faltaba gritártelo y repetírtelo cuanto sea necesario hasta que te quede claro. Un buen manjar se disfruta aun mejor con una buena victoria, hoy ganaste y seguirás ganando.

Una vez la dejara que se arreglara el fue hasta donde estaban los cadaveres, clavo ambas kamas en el pecho y acto seguido los tomaba y los cargaba en sus hombros como saco de papas, se dirigió hasta la enorme abertura que dejaron en la pared con la vista. . .<<+>>

colocando sus manos sobre las de su hermano esperando a que el cuello terminase de unirse conforme la menor seguía celebrando su victoria y contándole al azabache cómo había sido toda aquella pelea.

— ¡Y al final salí victoriosa yo, Onii-chan! Me siento hasta con energías de derrotas a unos cuantos más de estos... —

Terminó por regenerarse, moviendo la cabeza lado a lado como si se tratasen de movimientos de estiramiento. Gateó hasta un espejo que se encontraba en aquella habitación, observando que esta vez haya hecho bien aquello y comenzó por peinar sus cabellos que se habían desacomodado de su cabellera por aquella pelea.

Sus orbes estaban direccionados hacia Sus orbes se encontraban direccionadas hacia el tejado esforzándose por no querer llorar, esta vez no quería que su hermano la viera en ese estado; quería que viera el triunfo de aquella pelea contra los cazadores. Fue hasta que escuchó el crujir de la madera que volteó la mirada a la entrada de aquella habitación; ¿acaso se había olvidado de otro cazador? No podía ser ello. Su alma; si es que aún quedaba algún pequeño fragmento de la pequeña Ume dentro de ella, se sintió aliviada al ver que era su hermano mayor quien arribó. La demonio no pudo evitar sonreír ante su aparición.

— ¡Onii-chan! ¡Mira! ¡Mira lo que hice! ¡Lo logré después de bastante tiempo! ¡Los hice papilla! ¡Y son justamente dos! Hoy quedaremos panzonados de tanto comer. Jajaja. —


Se sintió aún más segura estando con él presente (+)

Una vez la suela de su pálido pie tocara la habitación solo vio un espectáculo de carmín entre las paredes y el suelo, con los cuerpos de quienes eran aquellos cazadores. Cerca de los cuerpos solo movía sus rostros con el pie para asegurar y comprobar su estado.

· ── No fue tan malo esta vez. Lo hiciste bien Nee-chan.

Afirmo para acercarse y colocarse de cuclillas para tomar aquella cabeza semi-quemada y decorada en carmin. Juntando la superficie del cuello con el otro extremo esperando a que regenerase.

· ── Pequeñas descuidos, evitar aberturas y no confiarse, pero a mi me gusta cuando muestras confianza, te hace relucir mas.