<Alter> -Así mismo sonrió de modo malicioso y le observó hacia atrás, con sus ojos de color carmín alzando su mentón.-
Por eso mismo Scáthach, es complicado que me pidas que te mate, si eso pasara, el otro yo se encargaría de eliminarme, y al hacerlo él también desaparecería. ¿Es ese el destino que quieres para todos?
<Alter> "Ve con el Perro Azul, yo ya encontré lo que necesitaba en Ullster, mientras que él evidentemente te necesita más que yo... En mi caso prefiero morar en medio de las sombras, Scáthach... Creo que eres el balance entre ambos, has visto la Luz de él, y mi total oscuridad, la única diferencia es que ahora somos dos. "
-Dijo de modo bastante simbólico, sabiendo bien que Sentata la forma de "luz" de Cú, el chico que la esperaba en su hogar en el fuerte más allá de las sombras que ella siempre había cuidado, ya se había despojado de él.-
<Alter> -Frunció su entrecejo al escuchar aquella petición y gruñó mirando hacia un lado, mientras sus dedos se convertían en puños, aquella cola se movía de lado a lado furioso. Este Cú a comparación del que ella conocía, era toda la rabia contenida de batalla de Sentata, el hombre que ella entrenó, toda la oscuridad que yacía dentro del hombre que ella amaba. Por ende el opuesto de aquel que solía acompañarle. Así que dejando atrás sus ropajes normales aquella armadura forjada de los huesos de una bestia legendaria apareció.-
Sería bastante molesto tener que hacerlo, además estoy seguro que mi otro yo se interpondría.