Te miro con un poco de desconfianza, evaluando la situacion, suspirando pesadamente, pregunto por mis cosas -Necesito mi movil, debo dar algunas indicaciones, por cierto, puedes llamarme Koizumi -Dije desviando la mirada, me sentia algo expuesto, me forcé a permanecer en el lugar en el que estaba, por alguna razón, no me sentía amenazado ni nada.
Gracias, espero no ser una molestia, ya encontraré la forma de compensarte por eso -Dije serio-
SW-User
Le llevé una mano al pecho, volteé a ver quien me había hablado, encontrándome con un chico algo mayor -Oh, Gracias, Lamento ser una carga, ya... Ya me voy, seguro que deben estar buscándome- Mentí, incorporándome, buscando mis cosas con la vista por la habitación, no quería sonar descortés, pero no sabía ser de otra manera.
SW-User
Sentìa como iba recuperando el calor, la lluvia habia dejado de atacarme, me movì un poco, llevando mi mano al centro de mi pecho, me costaba respirar, me incorporè, estaba en una cama, no se sentìa como la mia... -Marie? Que me ha ocurrido?- Preguntè a mi criada, creyendo que estaba en mi apartamento, aùn veìa todo borroso, mi respiracion consistìa en un notorio silbido- Debo hablar con el je... fe... -de pronto me callè, este aroma no era ni de lejos, el que habìa en mi apartamento, o en alguna de mis habitaciones de las multiples mansiones de la familia, la sangre se me congelò en las venas- Donde se supone que estoy? -Preguntè cuidadosamente-
SW-User
La tarde moría lentamente ante mis ojos, sin saber por qué me encaminé por las calles de la ciudad, sin un rumbo fijo, me adentré en un hermoso jardín, contemplando la belleza de las flores al pasar, sin prestare atención a ninguna en realidad, mi mente era un caos, sentí que había olvidado cosas realmente importantes, que solo recordaba ilusiones, ninguna realidad, sin darme cuenta me adentre en un hermoso laberinto de flores, lamentablemente, cuando quise regresar, había olvidado el camino, ya anochecía, hacia frio, y amenazaba con llover, solo podía adentrarme más en el lugar, aunque dudaba si en realidad, eso me fuera a servir de algo, cuando tiempo estuve así no lo sabía, pero cuando me percate de la hora, ya era realmente tarde, de seguro seria regañado por mi ausencia, en realidad, deseaba poder salir, por qué mi mente dejaba de funcionar correctamente cuando más la necesitaba? Cuando más necesitaba algo de claridad, solo podía oír el eco de una melodía lejana, algo que tal vez me había llamado la atención, no lo sabía, una gota... Luego otra... Otra más... Hecho, había comenzado a llover, a mis oídos llegaban melodías de un pasado incierto para mí… Koto, Shamisen, Shakuhachi, Tambores... Una voz de Mujer...
- Menudo lio... Debo volver pronto, o me descubrirán y me regañaran en serio *Suspire preocupado*
No tenía forma de salir, todas mis posibilidades estaban bloqueadas, que era esto? un mal chiste? Esperaba que sí, mi cabello estaba empapado, y mi ropa no estaba mucho mejor... Sabía que debía de haberme quedado, pero en realidad no pensé que fuera a tardar tanto... Tanto... Una idea cruzo mi mente... Si, tenía mi Tanto... Alcé mi mano para alcanzarlo en mi espalda... Nada... Mi mochila... Nada... Qué demonios? No podía ser verdad... Mis cosas las había dejado en el apartamento...
- Pedazo de idiota! *Me regañe mentalmente*
Una segunda voz surgió en mi cabeza... Que era esto? No podía estar volviéndome loco, o si? Claro que no, en ese caso me habría vuelto loco hace tiempo... No era posible... Definitivamente estaba volviéndome loco, de que otra forma podía ser posible esta extraña situación? Baka! Obviamente no te estas volviendo loco... Que? No, esto no tenía sentido, nada lo tenía, la lluvia que caía copiosamente, me había empapado completamente, ya vería como me escabullía en el apartamento sin que me notaran... Como si fuera posible hacer eso...
- CALLATE! *Mi voz sonó fuerte y clara*
Solo deseaba que mi mente se callara un instante... Dejar de pensar... Sumirme en ese vacío obscuro y profundo del olvido, aunque fuera un solo instante, encontrar descanso... Me llevé una mano a la cicatriz de mi pecho, aquella que siempre dolía, aquella que jamás me dejaría olvidar, que había sido castigado por imprudente, otra vez dolía, mi respiración se había agitado, me costaba conseguir aire, que era esto? Obviamente, grandísimo idiota, estas muriendo... Otra vez aquella voz? Esa voz... Era mi voz? Como podía ser posible? Muchas cosas no entendía, otras tantas no comprendía muchas más, nunca comprendería... Serás Baka? Esto lo deseaste tú... El negro y profundo vacío del olvido... Sí, creo que eso fue lo que dijiste... Entonces era verdad? El aire no llegaba a mis pulmones, a pesar de que lo intentaba, realmente intentaba respirar, pero con aquella voz, tan molesta, me era realmente difícil concentrarme en la manera adecuada de conseguir un poco de aire, mi cuerpo se había vuelto torpe, mis reflejos, eran nulos, me arrodille junto a uno de los arbustos, sentándome en el suelo, intentando, en vano, calmarme, fui cayendo en un horrible sueño, en medio de mis horribles alucinaciones, vi un rostro angelical, quien era? Había muerto? La melodía no se iba aun, pero... La voz no era de ella... Quien era, si no era la dueña de la voz que me arrastraba a las sombras?
