— ... — Guardo silencio al escuchar aquella palabras. Su mirada se situó en el piso, tratando de ocultar aquel sentimiento de culpa ante su irresponsabilidad. Aunque a decir verdad había sido él quien le había regalado aquella botella de sake (^-^')
De pronto una pequeña sonrisa se dibujo en su rostro para luego negar con la mirada ante aquel recuerdo. "No tiene remedio"
Clear tenia razón, en cierta manera (¬¬'), no podía escuchar mas que el seseo de las cigarras. Era un lugar muy tranquilo, no seria problema dormir en este ... De pronto se dio cuenta de la situación en la que se encontraba. ¿Que había pasado? ¿Que había hecho? Rápidamente el calor inundo sus mejillas, no sabia por donde comenzar. — Huh, Clear ... — Solo de pensar en la escena que puedo haber causado le daba dolor de cabeza — Yo huh ... no fue mi intensión ... ya sabes, ser una carga ...
- En mi antiguo hogar, Master. - Agrego animado ante la pregunta del contrario- Creí que seria buena idea traerlo aquí, es un lugar donde podría descansar plácidamente, alejado de todo - No era necesario decir eso pero igual lo dijo. [?]
Mientras lo escuchaba iba recobrando la compostura, abriendo sus ojos para luego encontrarse con los del albino. — ... ¿Donde estamos? ... — Murmuro aún teniendo aquel rostro cargado de somnolencia, se rascó suavemente los ojos con su mano mientas liberaba un pequeño bostezo.
- Master se quedo dormido luego de casi terminar esa botella de sake - Adquirió de lo mas normal y con una sonrisa en el rostro - Lo traje aquí para que pueda descansar.
Paso un buen rato hasta que la sobriedad volvió a él. Fue despertando poco a poco del profundo sueño en el que se encontraba, se removió ligeramente mientras lidiaba con la resaca que se avecinaba — ... nhn ... ¿Que paso? ... — Pregunto algo desconcertado.
Trataba de no moverse para no perturbarlo de su sueño. Mientras lo observaba se preguntaba y dudaba si realmente existiría algo mejor que verlo dormir. Con una sonrisa en el rostro se limito solo a descansar a su lado.
Sus ojos permanecían cerrados, disfrutando de aquel suave y acogedor lugar. Se mantenía quiero y calmado, siendo su respiración lo único que se podía llegar a oír en la habitación.
Pudo notar ligeros suspiros escapando de sus labios, se había quedado dormido. Por lo que simplemente se dedico a observarlo en esa posición, en silencio y admirando aquel rubor en sus mejillas el cual le parecía sumamente adorable.
