18-21, M
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KriegWanderung · M
*Se dice que la vida es tan efímera como la misma paz, es aquella la filosofía de los esparvus al estar inmiscuidos en innumerables guerras. O mejor aún, al ser ellos los arquitectos de las mismas.
Glorioso ante los de su raza, pese a que no hace más de dos años había sido un bastardo rechazado, y al cual se que quería ver muerto, se abre camino entre la espesa niebla de un solitario y espeso bosque, seguido por sus tropas.
Las manchas de sangre seca en las armaduras, las abolladuras y raspones en las mismas, delatan que aquellos guerreros regresan de una cruenta batalla, en la que, una vez más, han conseguido la victoria. Todos ellos siguiendo el camino en el que incursiona su líder, un demonio de la casta guerrera más temida de todo Einfelterra. Los esparvus.
Y quien va encabezando aquel inmenso regimiento de soldados abismales, no es sino otro que el príncipe bastardo de la misma. Un joven cuya sangre fría y falta de piedad con sus enemigos ya le ha dado el renombre de "El Despiadado" seguido de su nombre: Eberhard von Schwarzen.
En aquellos momentos se dirige a un castillo diferente del de su hogar, pero al cual planea convertirlo en un lugar al que pueda llamar de aquella manera. Aunque si mirada fría y cruel en sus ojos carmesíes no demuestre alguna emoción al haber dejado un baño de sangre a espaldas de su ejército, en realidad, para el es bastante grato el dejar toda aquella aura de destrucción que le manden el mensaje a sus enemigos y posibles opositores.*
Glorioso ante los de su raza, pese a que no hace más de dos años había sido un bastardo rechazado, y al cual se que quería ver muerto, se abre camino entre la espesa niebla de un solitario y espeso bosque, seguido por sus tropas.
Las manchas de sangre seca en las armaduras, las abolladuras y raspones en las mismas, delatan que aquellos guerreros regresan de una cruenta batalla, en la que, una vez más, han conseguido la victoria. Todos ellos siguiendo el camino en el que incursiona su líder, un demonio de la casta guerrera más temida de todo Einfelterra. Los esparvus.
Y quien va encabezando aquel inmenso regimiento de soldados abismales, no es sino otro que el príncipe bastardo de la misma. Un joven cuya sangre fría y falta de piedad con sus enemigos ya le ha dado el renombre de "El Despiadado" seguido de su nombre: Eberhard von Schwarzen.
En aquellos momentos se dirige a un castillo diferente del de su hogar, pero al cual planea convertirlo en un lugar al que pueda llamar de aquella manera. Aunque si mirada fría y cruel en sus ojos carmesíes no demuestre alguna emoción al haber dejado un baño de sangre a espaldas de su ejército, en realidad, para el es bastante grato el dejar toda aquella aura de destrucción que le manden el mensaje a sus enemigos y posibles opositores.*