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[code]Su siniestra mano se dedicó a tomarla por detrás de la cabeza, enredando sus largos dedos por la sedosa cabellera para tomar el total control de los movimientos que pudiese ejercer su cabeza, la cual fue apegada contra la fría superficie de la pared mientras su diestra se mantenía juguetona entre las nalgas femeninas; concretamente daba de fuertes golpes que lograban hacerse audibles para cualquier transeúnte que estuviese alrededor, pero su palma no se limitó a sólo eso; también se adentraba entre los colosales atributos traseros que no se quedaban atrás en cuestión de tamaño con las tetas que poseía su acompañante. La negrecia prenda volvía a obstruirse en su camino, y con un solo movimiento que fue disfrazado por una caricia desde la vagina hasta el angosto agujero, desgarró nuevamente la vestimenta. Su miembro viril aún se mantenía erecto, sucio y bien lubricado por la mezcla de sus fluidos corporales, fue aproximado hasta la separación de los extraordinarios glúteos. Con su diestra, que ya se encontraba libre, tomó las manos de la fémina para colocarlas en una zona específica del culo que poseía, dándole a entender que debía presionar su culo para el mismo comprimiera su pene entre los glúteos, y de esta forma, mover su pelvis simulando las fuertes embestidas que disfrutó la sucia vagina de su presa; fue así como se masturbó, empleando el uso del tamaño de las nalgas femeninas para su propio deleite carnal. Disfrutaba del estrujamiento sobre su miembro, pero ansioso por penetrarla por el culo, finalmente se decantó por hacerlo en una fiera arremetida que acompañó con una salvaje nalgada que fue marcada sobre la pálida tez, y estas acciones se vieron efectuadas con una sádica sonrisa que gozaba del lascivo momento donde su pene la destrozaba analmente en un solo movimiento.[/code]