Estoy más que cuerda , yo sé dónde estaba . Pero como dije no me asombra de todo me pasa en estos años .

- Solo respira tranquila , sabe que de sus labios sus palabras son jonestad sobre todo trata de analizar de pies a cabeza buscando una respuesta , no es de dejar cosas a medias sobre todo con esto tan extraño que sucede . -

Bueno y que me cuenta de usted ... Puedo ver qué llevas esto por años .

— Venías muy distraida caminando... te encuentras bien? Necesitas alguna clase de remedio?

El castaño solo se quedó mirando a la mujer con cierto aire de preocupación, de igual forma algunos clientes y miembros del gremio que pasaban el rato en las mesas. Aún así este hizo caso a la mujer y comenzó a servirle algo de comida y vino para que descansara aunque sea un poco.

— Yomeguri... realmente ese nombre suena ajeno a esta ciudad jajaja

- No entiende como y el por qué se encontraba en aquel lugar , solo recuerda que caminaba por un parque contemplando las flores y de la nada llegó a aquel extraño lugar mientras miraba a aquella persona quien es el dueño -

Sin duda esto es una de las cosas más raras que me han ocurrido , saliste de nada . Pero bueno ... No suelo ser tan amistosa con otros aventureros , mi camino lo e seguido sola tengo amistades pero me gusta ser así , un gustó soy Yomeguri y bueno ya que estoy de paso me relájare un poco .

— Huh? Bienvenida a la taberna Alas de Plata! Soy Bayaseto el dueño, puedo ayudarte en algo extranjera?

Su exuberante cuerpo no fué lo que llamó la atención del castaño sino el hecho de que parecía faltarle un brazo además de un ojo; definitivamente no era de la región mas aún así le trataría con el mismo alto carisma con el que trataría a cualquiera.

— También es un gremio de aventureros, por si necesitas alguna clase de suministro, no dudes en pedirlo.