Nos veremos en otra ocasion -se despide de Azul para irse en direccion a sus clases, teniendo todo el cuerpo vendado-

- A diferencia del lobo, Azul simplemente hace una inclinación de cabeza - Y yo debo darme prisa o llegaré tarde a la biblioteca. Mi asesoría sobre contratos mágicos y hechizos de sujeción no puede esperar.

Vamonos entonces -tambien se viste, agradeciendole a la enfermera por encargarse de sus heridas, saliendo de la enfermería hacia el pasillo- Es hora de las clases ya debo irme

De todo tipo mi querido Jack. Siempre que haya una gran necesidad y eso me de un alma... - Un brillo de codicia apareció en sus ojos y bajó los párpados, terminando de vestirse - Vámonos.

Que clase de contratos haces? -camina alrededor de el para poder ver el contenido del contrato, ya habiendo sido curadas sus heridas- Mejor nos vamos, o quieres quedarte descansando en la enfermería

Porque a la derecha no me da estilo. - Trata de recuperar el sombrero - Debo dar buena apariencia en los negocios. - Siente algo raro y abre mas los párpados, luego sonríe. Abre la palma izquierda y un contrato dorado aparece en ella. Su firma antes dorada ahora es negra - Oh... ¡Que triste! Otra alma que no cumplió el contrato.

Y si se va a la derecha por que no te lo pones para la derecha? -le parecia absurdo el ir en contra de los deseos de su cabello-

Tienes suerte. Yo trabajo para llevarlo a la izquierda. Normalmente se me va a la derecha. Debo usar mucho gel. - Suelta un suspiro resignado. Normalmente lo lleva hacia arriba, pero lo prohíben en la academia -

Tanto tiempo pasas para atenderlo, yo solo me cepillo un poco y ya lo tengo arreglado -lo unico que le tomaba tiempo a Jack era el maquillarse los ojos

¡Jum! - Se cruza de brazos rojo y ofendido mirando a otro lado altanero. No dura mucho, su perfecto peinado le es alterado por una inquieta mano - ¡Oye! No estropees mi cabello. Hay negocios por atender.