AyameKazumi

Off. Pues claro que vamos a ser bien amigos :3 Me lo dice mi corazón.(?)

On.

–Dalton caminaba en dirección a su hogar y traía consigo un pedazo de pan que minutos atrás le obsequiaron para que dejará de jugar con su cachorro en plena calle que era transitada por vehículos.
El peli negro caminaba realmente feliz, podría cenar algo delicioso acompañado de un chocolate que le pediría a su padre. El chico se detuvo al sentir como su perro olfateaba su pan– Mapi no.. El pan no te lo puedes comer aún.. –Lo levantó sobre su cabeza impidiéndole al can que lo agarrará con su hocico. Corrió para que no se le fuera arrebatado hasta ver a lo lejos una chica que se mantenía feliz cortando flores, se acercó – Hola! ¿Qué haces? –Preguntó curioso mirándola fijamente –

El prado lleno de flores, era el escenario donde una niña de cabellos dorados se encontraba de rodillas como si nada sucediera.
A lo lejos una joven de cabellos pelinegros, llevando un vestido azul oscuro, lo cual para ella era su color favorito, en su diestra, tenía un paraguas del mismo color con bordes negros, era un regalo de uno de sus tantos caballeros, llamado Solomón. La joven se encontraba sentada en una de las bancas las cuales adornaban el lugar como descanso para los transeúntes y gentes que vivían a los alrededores.

La joven que se regocijaba al ver la inocencia de la pequeña niña a lo lejos, se llamaba Diva Goldsmith, una vampiro que deseaba venganza, sobre todo con su hermana llamada Saya, había salido de la torre en la cual había estado por más de 70 años, pero ahora en libertad podía tener la venganza que tanto ella deseaba.
Aquellos pensamientos fueron interrumpidos por uno de sus caballeros, aquél joven de cabellos dorados que se hacía llamar Solomón, éste había regresado de un encargo que la joven pelinegra le había encomendado, que era localizar a su hermana Saya.

—Tenemos localizada a Saya, Diva.— Respondió el joven con aquella melodiosa voz que era muy característica de él, por lo cual Diva lo había transformado en uno de sus caballeros.

—Quiero divertirme un poco Solomón.— replicó la joven sin hacerle caso a lo que el caballero había mencionado, referente a lo de su hermana. Colocándose de pie, empezó a caminar dirigiéndose donde la joven de cabellos dorados se encontraba sin alguna preocupación.

Miraba con serenidad a la chica sonriendo un poco por sus palabras. Acarició su nuca pensando un poco sin dejar de mirarla, Elian suspiró – Son para mis padres que llevan ya bastante tiempo muertos. –Exclamó serio mirando el campo de flores. Sus manos se ocultaron en los bolsillos de su pantalón y su rostro se ladeo un poco en espera de que la chica le ayudará –

Off: Gracias por aceptar mi solicitud. ~

|| No hay de que. Y claro, cuando ud lo desee.

R/Off. Hola pequeña. Gracias por la solicitud y ya verás que mi personaje tratará de calmar su carácter y no hacerte enojar tanto..

R/On.

–Corría de un lado a otro riendo por cada salto que daba, no era la primera vez que la policía iba detrás suyo para que este estuviera encerrado. Disparos y patrullas se escuchaban en la zona, aquel chico trataba de no caer y esquivar todos las balas que tenían el propósito de acabar con su vida.
Lo vio, a lo lejos un campo de flores que sería su gran aliado para escabullirse de los uniformados, un gran salto le ayudo a caer en el pastizal, rodando y escondiéndose en la maleza
Suspiró y con cuidado comenzó a caminar alejándose de la mirada policial. Se encontró con una chica que daba la sensación ser menor de edad, gruñó un poco y saludó con su mano– Hola linda.. ¿Qué haces aquí tan sola?. –Preguntó con ese toqué coqueto tratando de que la chica no lo delatará–

[code]S-solo preguntaba por curiosidad, pero puede usar las mesas para leerlo aquí mismo o tomarlo prestado para que lo puedas leer en casa.[/code]

[code]— negaba despacio teniendo una amable sonrisa en los labios, al estar mirando a la joven pero se sentía un poco culpable por lo que había mencionado, y solo se voltea despacio señalando con la palma abierta las sillas de maderas que estaban junto a unas largas mesas del mismo material; ya no iba a meterse en las decisiones de la joven —[/code]
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