-Su respiración era forzosa y descontinua mas su garganta seguía igual de cerrada. Movió sus labios lentamente y logró gesticular la palabra "agua".-

-Sin más la lleva expandiendo sus alas hacia un mejor lugar. No mucho después llega al Castillo Dumont Crowley para poder tratarla mejor- Venga ¿Puedes oirme?

-Su mirada nublada siguió aquella voz masculina pero no respondió puesto que su garganta se había cerrado. A pesar de que a simple vista no había nada raro con ella, sentía como si serpientes estuvieran enrollándose por todo su cuerpo.-

-Llega rápidamente con ella tomando su mano- ¿Dime estás bien?