- Te amo y te he extrañado en gran manera -

" Le toma de igual forma por las mejillas y le llena de besos, muchos besos "

Lo tomo de las mejillas para robarle un beso.
-Y yo a ti -

- Te amo hermosa mia -

- Lo tendré presente, nunca sera mi deseo ofender a mi amada -

" Con todo amor le da un beso en la punta de la nariz "

Sonrió nuevamente serena.

-Si, te perdono, pero recuerda que las palabras cortan más que la espada.-

- Hermano ..?? Jamas, he tenido un par de roces con ese tipo, pero no es familia -

" Le abrazaba con cariño acariciando su mejilla, esperaba el Rey se apaciguara el enojo en su amada "

- Me perdonas ..-

Me detengo por un instante.
-Es tu hermano?-

Pregunto a mi amado, algo confundida.

-Sabia que tenías una hermana, pero un hermano no.-

- Bonita .. Noooo ..!!!, maldito sea ese cabron, me la pagará -

" Corre tras Ara, le abraza por la sintura con cariño y le muerde una oreja, detiene su paso y le susurra "

- Perdoname cariño, me provocaron, tu no eres mi trofeo, eres mi preciado tesoro bonita -

Yo sólo venía a saludar, lamentablemente olvidaron ponerte correa esta mañana, Bestia ..!! , -

^ La mujer se mostraba molesta, a lo cual el rubio inclino el rostro en reverencia ^

- Mil dusculpas hermosa dama y tenga cuidado, mi hermano pierde la cabeza con facilidad -

" Palabras con tono sarcástico y de burla, simplemente quería molestar a una dulce pareja y encontró una, así desapareció como luz que desvanece, sin permitir alegar más a ninguno "

Dejo que el pelirrojo termine con comportamiento y discurso antes de concederme el placer de opinar. Me aparto de un paso, para reincorporarme, como toda una dama antes de hablar.

-Señor Zet, le agradezco por su preocupación y visita, pero no le permito de hablar en este modo de mi pareja, como no le permito de opinar y manipular mis gustos, como si fuera un infante aún con muchas cosas por aprender. Con este comportamiento AMBOS me ofenden. No soy el trofeo de nadie, como para contenerme en este modo.-

Dicho eso, me doy la media vuelta y comienzo a marcharme con la cabeza alta y el ánimo ofendido.