* se sorprende al recibir aquel beso inesperado, luego solo la mira pero de esta vez la regala una sonrisa*
Gracias,eres amable.
*la toma de su mano y deposita un beso cálido sobre el dorso de su mano luego la suelta*
Yo también lo espero.

- Pero usted no vive aqui, solo esta de paso

-sonrie de medio lado y se le acerca gracil dandole un beso en la frente-

- espero los Dioses iluminen vuestro camino y le permitan encontrar a su hermano

Raro... porque yo si soy un dragón.
*suspira un poco y baja su vista*
Pero gracias por la ayuda.
*la mira de nuevo en los ojos*

- Aqui no vive ningun Dragon ni se asoma en lo mas minimo, no sobreviviria ante tantos campos envenenados de rosas, creo que aqui no podra encontrarlo, disculpe usted

Es mi hermanito, Ikuto Sakuya, no es mi hermano de sangre pero lo considero uno. Es un dragón...pero nunca lo vi en su forma humana.

- ¿que clase de persona esta buscando? quizas mis caballeros podrian ayudarle en ello

-suspira un poco-

- ¿puede curarse ante el veneno de rosas mortales? que sorpresa

Para decir la verdad estoy aquí en búsqueda de aquella persona.Ya fui en muchas ciudades, pero no lo encontré.
*se sorprende un poco al oír que mejor no entra en aquel lugar para que no se lastima*
Gracias pero si algo me pasara, puedo curarme. Pero no creo que me voy a entrar allí porque no se encuentra allí.

- Ha venido hacia aca y me sorprendo por ello, estos son los dominios de mi persona, esto es Venus

-aquello lo mencionaba con toda la normalidad del mundo mientras reia entre dientes-

- si estaras de visita aqui no encontraras a nadie conocido, y no entres a los campos de rosas, podrias lastimarte

El placer es mio, Aphrodita.Me podrias decir donde me encuentro?Estoy buscando a alguien pero no logro a encontrarlo.
*la esta mirando en los ojos*
Es un placer a conocer una Diosa.

- Un placer joven Nowaki, me presento, mi nombre es Aphrodita, Diosa de la belleza, el amor y la lujuria

-la propia hace una reverencia con la espalda recta tomando los faldones de su vestido para no arrastrarlo por el suelo, reincorporandose gracil-