- Eso quiere decir que el otro bebé también es niña?

Sonríe suave abrazando y acariciando el vientre de su esposa recibiendo esos agradables y mimosos besos.

- Es una niña.

Les informa la doctora tranquila.
Con una sonrisa más alegre, Nina se abraza a su mujer besándole con ternura la mejilla.

— Está bien, más chicas para la familia...

La azabache inevitablemente abraza a Nina y asiente, estaba bastante feliz y callada, no sabía que decir.

- Aquí están, sin dudas. Número uno y número dos. De tamaño adecuado y con un crecimiento normal.
Señaló la mujer esa fotografía oscura.

Nina no dice nada por largos segundos, solo enrojece y baja la mirada así misma, a su vientre ligeramente abultado.

— ¿Ellos... ? Ellas... ¿Qué son?
- Sólo puedo ver el sexo de un embrión, el otro está de espaldas. ¿Quieren saber?

La pelirroja voltea la mirada a Anto, le sonríe suavemente.

Antonella mira la pantalla y luego la panza de su esposa, nuevamente a la pantalla o de vuelta a la panza.

- Gemelos... Dra ¿Pero como es posible?

Mira a Nina, era para ella también una gran sorpresa, Antonella ríe vacilante y luego a la doctora.

- ¿Segura? No será cabezon el muchacho y por eso parecen dos bebés (?)

La imagen en la pantalla era incomprensible para Nina, negó confusa entre cerrando la mirada hacia la señora.

- Nada de que preocuparse, solo encuentro inusual que una omega...
La doctora decide girar la pantalla hacia la pareja, señalando esas dos manchas grises con una sonrisa.

- Felicidades, son gemelos.

De repente Nina se sienta , mirando atentamente y suelta sin vacilar.

— Está bromeando, ¿Verdad?

Voltea su rostro a Nella, buscaba una respuesta porque estaba genuinamente confusa, y en negación.(?)

— Amor, ella bromea...

Antonella miraba atenta la pantalla apretando sutil la mano de su esposa. Ante tal pregunta mira a Nina con extrañes y luego a la doctora, en silencio Nella mueve la cabeza en negación suave y luego observa a su esposa.

- ¿Q-Que sucede Dra?

La pareja se encontraba en el hospital. Como en los embarazos anteriores, Nina debía realizarse una ecografía de rutina.

Se encontraba tumbada en una cómoda camilla tomandole de la mano a Nella, a su lado.
La doctora colocaba el frío gel sobre su vientre y el pequeño aparato se deslizaba sobre su piel revelando las imágenes en la pantalla. Es en ese momento que la mujer se queda en un largo silencio, ajustándose los anteojos ante la ecografía, mirandolas a ambas.

- ¿Hay antecedentes de embarazo gemelar en sus familias?

Pregunta con una curiosa sonrisa.