Si hay matemáticas entonces no quiero, es mucho trabajo...

-con una enorme sonrisa Nira recoje sus cosas y sale de la oficina de su madre no sin antes despedirse se ella-

Adiós mamá y ya te dije que Dante sólo es para estudiar, no para jugar

- Si, hay mucha matematica... depende del cargo que desees tener

Extiende su mano acariciando su mejilla.

- Ve a jugar con tu elefante magico ~

En esos negocios hay matemáticas??

-observa su libro recién corregido y lo guarda tranquilamente en el interior de su bolso-

Si mamá, un elefante de la suerte, para los exámenes...

- Los negocios familiares, la empresa de tu madre y la mia, cuando crezcas seras parte de todo esto si asi lo quieres

Le mira tranquilamente aun curiosa por el fulano elefante. Nella se aŕregla los lentes

- Entonces... un elefante de la suerte...

No es un amigo imaginario, es un elefante de la suerte, amm que negocios? -toma su libro abrazandolo sobre su pecho-

- Oh, ¿Un amigo imaginario?

Vuelve su mirada a las notas cerrando su libro.

- Todo en orden, haz mejorado en matematicas

Le entrega el libro dejandolo al aire para que se acercase y lo tomara. La italiana seguia sentada elegante esperando por su hija.

- Sabras manejar bien los negocios

Dante el elefante, me ayuda en los exámenes que tenga por delante, duh
-expresa confiada-

Antonella gira su rostro y enarca su ceja.

- ¿Y quien es Dante?

Paro por un momento las notas de su hija.

Claro que no tengo errores, todo es gracias a Dante... Apúrate que quiero jugar -estaba algo inquieta-

Llevaba a penas unos dias encerrada en casa por la sentencia de seis meses de carcel en casa que le habian dado por el delito del hermano de Nina. La azabache cuidaba de sus hijos mientras Nina trabajaba, Nella revisaba la tarea de Nira tranquilamente.

- No tienes errores, aun no termino de corregir señorita

Menciona pasando de hoja.