- ¿Esta noche?... pero la niña se levanta a cada 3 horas...

Pregunta curiosa mirando a su esposa, claro que quería pero sabía que la pequeña despertaba de vez en cuando para tomar su leche.

— Qué pícara eres, Black. ~

Le responde melosa y luego le guiña el ojo; la actitud coqueta de Nella era contagiosa y le despertaba ciertos sentimientos.

— Entonces quizás ésta noche...

Un rubor también se asoma pero le agradaba la idea, coqueta se le acerca acariciando con la punta de su nariz la mejilla contraria.

- Nos cuidamos mutuamente para que no aparezca otro.... ~ lo importante es disfrutar...

Su voz estaba coqueta y gruesa.

El rubor adorna las mejillas de Nina y observa cómplice a Antonella.

— Tengo que confesarte que me siento igual. P-pero mi doctora dijo que estoy muy fértil luego de tener a Nira así que tengo que cuidarme de ti. (?) De igual forma, podemos...

- Últimamente ando muy... uhm... sexual coff... (?) las feromonas (?) pero si, es buena idea que se la lleven un rato y ... tener nuestro momento

Las observa a ambas sonriendo suave.

— Es una buena idea. Ven aquí preciosa...

Dijo al sostener en brazos a la pequeña.

— Me parece que es algo bueno tener distancia de ellos, aunque luego van a querer verla más seguido incluso llevársela. Eso estaría bien, así podemos pasar un rato a solas~

- ¿Planeamos un almuerzo?

Pensó en ello por un momento pasándole la bebe a ella.

- Es lo malo de vivir lejos de ellos, o quizas algo bueno, no lo se

— Y también porque es tuyo, y tú eres su mamá. Te está reconociendo.

Nina también quería acariciarle el cabello azabache, así que lo hace y juega con el un poco entre los dedos.

— Amor... Debemos invitar a nuestros padres para que la conozcan.

Le besa la frente a su mujer.

- ¿Será por eso?

— ¡Aw! Ya veo. Tu cabello es suavecito, le llama la atención.

Comenta sonriente y acaricia luego la mejilla de su hija.