@セバスチャン ミカエリス: - Tendida en su divan, le fue servida una copa de vino por parte de uno de los guardias, bebia un sorbo leve tomando la copa por la columnilla, expuesta la erotica belleza de su cuerpo en pleno, la serena sensualidad de sus ojos, el misterio de su persona, los labios, carnosos, humedos, en tono durazno brillante envolvieron cual delicado paño de seda el delicado cristal de la copa, recibiendo su liquido contenido, observandole con majestuosa arrogancia - Se que no me fallaras mi hermosa creacion. - a ambos lados de ella, dos esclavoz, descarnados y escualidos, envueltos en humildes capas de tela rasposa, agitaban lentamente grandes abanicos para mantener fresca y comoda a la diosa -
Yo soy su mayordomo, lady Anubis. -Emite una sonrisa leve, la cual puede dejar más qué apreciar con la intención de la misma al posar sus ojos sobre el recostado cuerpo de la fémina.- Siempre estaré al pendiente de una diosa que es capaz de hacer mover los cimientos del infierno mismo.
@セバスチャン ミカエリス: Eres muy obediente mi querido Sebastian, alguien de quien puedo fiarme. - le sonrio mientras se tendia en su divan, cruzando las piernas - mi estimado demonio cuyos apetitos pueden compararse al mas oscuro pecado.
Creo que jamás he servido a un dios... Lo que necesite, my lady, estaré a sus servicios. -Le parece realmente increíble que ella pueda ver lo que otros no, ahora no dudaba de su pureza y poder divino.-
@セバスチャン ミカエリス: Eres adorable y encantador mi estimado mayordomo, mas ¿que te trae hasta aqui mi hermoso demonio? - sonrio amable, ella ya conocia el secreto de aquella criatura al ser una deidad que todo lo veia -
Debe ser un privilegio verle descansar. -Pone su diestra sobre su pectoral derecho, mientras asiente con la cabeza y una sonrisa de medio labio- El placer es mio, Anubis-sama.
