« Back to Album
This page is a permanent link to the comment below. See all comments »
Anne, había aprendido a leer con ayuda de un buen hombre que servía en el orfanato, por lo que siempre que podía se ofrecía para labores domésticas a cambio de que le permitan leer algún libro. En ese momento, la pequeña, se sentía protagonista de su propio cuento de hadas. *

¡Buenas tardes, señorita! Me llamo, Anne y sí soy una huérfana del orfanato. * De inmediato fue hasta ella e inclinó su cabeza, haciendo una breve reverencia a manera de saludo, según, Anne, era la forma correcta de saludar a los mayores y adinerados, eso leyó en un cuento. Trató de no emocionarse más de lo debido, pues había niños más pequeños en el orfanato y solían ser preferidos por la mayoría de personas.
 
Send Comment

Add a comment...
 
Send Comment