¿Ah no?

—Pensativo al escucharlo, tomó los libros y los miró por un momento. Era verdad, debía volver a aprender bastante pero estaba considerando cometer un homicidio primero, aunque por sus hijas y la prioridad hacia ellas, se fue a leer con calma.—

Tu a la cabaña aún no estas capacitado para entrar al infierno menos al círculo de la lujuria, lee libros de agricultura espero....

-solo pidió libros y tomo los que tenían imágenes de verduras o frutas aunque sospecha que son más cuentos. Toma a su niña de nuevo retirándose al infierno -

—Ignoró de forma Olímpica a aquella mujer que hablaba sin saber siquiera, manteniendo la sonrisa en sus labios para ir tras el demonio con sus hijas, tomando a una de ellas con cuidado y dejándola sobre su cabeza.—

Vamos, Ada~

—Musitó suave, observando de reojo al demonio y sonriendo.—

¿A dónde iremos, Hóng lù? Por cierto ¿Ya viste que les empezaron a crecer los dientes?~

-Viendo que el demonio se ha ido con las niñas, se retira volando del lugar. Ya dijo que lo que tenia que decir. No quiere formar peleas.-

....

-lentamente se retira con las niñas para llevarlas a loo loo land aunque detesta ese basurero pero al menos pasará buen tiempo padre e hijas con ellas-

Soy un arma viviente y de destrucción masiva. No me provoques, Xian. Tú te metiste en medio de nosotros, te aprovechaste de su celo para entregarte en bandeja a Aly, y amarrarlo con las hijas que ambos tuvieron. No te hagas el inocente porque eres más astuto de lo que imagine.
Ya me estás hartando, y bien malagradecido que eres porque cuide de tuw hijas. ¿Arrastrada, yo?. Tú estabas siempre rodeado de miles de hombres, no fuiste fiel cómo lo soy yo. Jamás amarraría a un hombre cómo lo haces tú.

-Le dice todo lo que siente y muy molesta. No iba a pelear ni rebajarse ante ese ser egoísta.-

No te importan los sentimientos de Alastor, por tu culpa, lo vas a hacer miserable y vivirá al lado de quién su corazón no desea estar. Si está contigo es sólo por las niñas, no porque te ama.

No pienso pelear más porque eso molesta a Alastor.

Hóng lù, seré muy claro... No quiero a mis hijas cerca de esa mujer. Sabes que ya no estoy limitado y ganas de matarla no me faltan~
Los dragones somos territoriales, lo vine descubriendo y es algo que pienso tomar muy a pecho donde esa arrastrada mujer tenga cualquier contacto con NUESTRAS hijas... Incluso podría permitirles comérsela, cuando mucho~

—Musitó con calma y una sonrisa sumamente dulce, tampoco tenía intenciones de una pelea burda pero iba a empezar a imponer su espacio y prioridades, en especial con sus pequeños soles del infierno.—

-alzó unas de sus orejas moviéndonos en dirección a la amazona -

Aún estoy quitando el veneno a la carne, se maldijo a si mismo cuando estaba muriendo cuando vea que es segura la carne te dare un trozo fresco

Yo no empiezo las peleas, mi querido Aly. Yo le ofrecí mi amistad a la madre de tus hijas pero no quiso. La idea tampoco es que practicamente vayas a "suicidarte" por pelearnos.

-Mira con una sonrisa a su demonio que carga a sus hijas, después de todo, ella lo ayudo a cuidar por un tiempo mientras el dragón estaba fallecido.-

Que lindo te ves con tus hijas, Aly. Me alegro ver que las pequeñas están bien. No puedo negar que se siente algo triste sin ellas en casa.

Que peculiar comida nos has traído y yo, encantada la probaría con gusto. ¿Cuando podemos probarlas?.

Donde se pongan a pelear ustedes tendrán que ir a visitarme pero en mi tumba

-observó a dragón y amazona antes de recoger entre brazos a sus cachorras, es un padre muy amoroso extraño a sus pequeñas bastante incluso les trajo un regalo. Dejo en medio de sus hijas una mano negra con garras afiladas -

Les traje comida, seguro les va a gustar ~ decía que era un demonio de las plantas y claro que sabe como el pasto fresco cubierto de rocío por las mañanas con sangre fresca bañando sus hojas