— Hm... Sujetala con las dos manos, el tomar una pistola así es más difícil de lo que crees.

—¡A Anya le encanta!— Mencionó con singular alegría y con la pistola en las manos imitó las poses de Bondman cuando disparaba.

Era una pistola bastante común, sin peso, simulaba ser una pistola de bajo calibre con el silenciador puesto. —¿Te gusta?

—¡Wha!— Recibió el arma sin poderlo creer... ¡tenía una pistola en sus manos! La inspeccionó con la mirada y después sus deditos recorrieron el cuerpo del objeto.

Tomaría una de las pistolas, de indumentaria para acercarla a la menor y luego le sonreiría. —Ten.

—Pistola con silenciador... — Juguetes, decoraciones o lo que fueran no representaron impedimento a Anya y a su curiosidad. Se aproximó a la zona estirándose en un intento por alcanzar alguna.

—Son de juguete... Solo son decorativas, ya que trabajo de modelo en este lugar... Y tocó hacer una sesión.

Toda su atención se desvío a las distintas armas que colgaban detrás del mayor. Sus ojos destellaban emoción por el parecido con las que salían en Spy Wars, su anime preferido. —¡Wha! Pistola con silenciador...

—Claro, solo recuerda que no debes salir muy lejos sin tus padres.— Se agachó para así acomodar el cabello de la chica en una pequeño flequillo y en la parte superior colocaría el broche en forma de maní.

—¡Chi! A Anya le gustan porque son brillantes y coloridos. — Explicó a la par que continuaba atrapando cuantos podía con sus manitas. Se detuvo porque Lobo le mostró el hermoso broche prometido causando gran emoción en la menor al notar ese detalle del maní. —¡Un maní! ¿Me ayudas a ponerlo? Por favor...