-Rodo los ojos ante su petición pero decidió continuar con el juego y cerró los ojos-

Bien, ya los cerré…

— Cierra los ojos... — Ya estaban tan cerca que podían incluso crear un ambiente cálido por el aliento.

-Parpadeo sin tener alguna reacción al notar que se le acercaba mirandole fijamente, empezando a perder la paciencia en que no le dice nada-

¿Si…?

— Alice... — Solo repitió, aferro mas su mano y aproximo el rostro lentamente sin separar la mirada.

-Aquella escena le era peculiarmente divertida, el sacarla de sus casillas en ocasiones por sus delirios-

¿Qué sucede…?

Intento mantenerse estoica pero le apretó mas las manos a Alice por como le cortaba el mood. — Bella A-Alice, solo mirarte a los ojos hacen que me sienta a la deriva en un océano. — Su melena rubia censura sus turgentes pechos, vestida con una tela que cubría su cintura unicamente. Se aproximo cuando se alejo. — Alice... —

¿Qué…?

-Aún no logra despertar por completo cuando la ve bajarse del caballo y caminar hacia ella para tomarle la mano-

Has estado viendo telenovelas de nuevo ¿verdad? -Respinga un poco- Ya te he dicho que eso no te trae nada bueno a tu cabecita de chorlito

— Del hechizo que tienes para volver locas a las personas... — Se bajo del caballo con lentitud y con leve miedo de caerse, pero lo consiguió, ahora se acerco hasta hincar la rodilla y tomar la zurda de la albina entre sus manos. — Tu pelo acendrado a sido la telaraña que me tiene cautivada y atrapada... — Ella siguió su actuación improvisada. (?

-Ella simplemente se había quedado dormida sobre las flores del campo, perdió noción del tiempo cuando escucho aquella voz familiar y para variar le cubría un poco del sol. Por lo que abrió lentamente los ojos algo adormilada sin darse cuenta que la rubia practicamente andaba al pecho descubierto-

¿De que rayos estás hablando? ¿Qué hechizo? ¿Lord Geraldthon volvió a conjurar un hechizo sobre el reino?

Ahí estaba Lady Bee, subida a su fiel corcel Honeyrush, sin tener tiempo de recoger del atelier su traje de princeso, se aproximo a la bella princesa Alice. — Oooh...Quién quisiera ser tu Sol para alumbrar tu día y la luna para velar tus sueños. Bella Alice, vengo a liberarla de su hechizo. —

(?