─ Ya veo... entonces así es cómo se manejan estos cobardes.. ¿Quién lo diría?... ─
Tomó partido dentro del plan de Aly y observa cuidadosamente cada uno de los puntos señalados, buscando de inmediato una ruta cercana hasta donde se ubican quienes se encargan de custodiar a su objetivo principal.
─ Es casi obligatorio separarnos señorita Aly... de otra forma, las probabilidades de éxito se reducen... crearé una distracción... voy a ser el señuelo, sus francotiradores deberían verme y trataran de eliminarme, tú debes aprovechar esos segundos para acercarte y noquear a Heim, te daré tiempo suficiente para sacarlo de aquí, y te veré en un punto seguro... debemos obtener toda la información que podamos de él...─
Acomodó los pliegues de su traje y ató su cabello en una coleta más cómoda, para prepararse.

— Odia eso ya que así las chicas no se acuestan con él, pero sí, tiene guardaespaldas, míralos.

Kim sonríe un poco y toca un botón dentro de uno de sus bolsillos, se iluminan ligeramente en los edificios varios francotiradores, tenían un punto luminoso en sus espaldas pero no sería visible para ellos mismos. Kim los va señalando, eran unos 10 en total.

— Es una ventaja tener mil caras, normalmente nadie puede verme. Aún así será difícil irlos eliminando uno a uno, el protocolo de seguridad hará que si descubren rápido que eliminamos a alguno aparezcan otros a llevarse a Heim. . . ¿Nos dividimos?

─ En otras palabras son los chicos malos y son escorias... muy bien! esperemos a ese tal Heim y averigüemos un poco más sobre el líder de Star ....
Ataviado con un traje que, aunque informal consigue darle ese semblante de chico malo, dispuesto para afrontar cualquier situación que se presente.
Atendía las palabras de la dama con cuidadoso detenimiento, esperando terminar su misión a la brevedad posible, cuidando los detalles para evitar errores. Como era costumbre, su afilada y letal espada acompañaba su uniforme esa noche, misma que quizás pasaría a marcar un antes y un después en su nuevo objetivo.
─ Imagino que será una emboscada, pero dime algo... ¿alguien de ese calibre no debería al menos estar rodeado de guardaespaldas? sé qué no va a ser fácil acercarse a ese tipo, ¡pero estoy preparado para hacer cualquier cosa para que puedas acercarte y atraparlo... Cuentas conmigo!

— A Star no lo consigo aún, después de todo el dueño de toda la corporación con su nombre es muy difícil de hallar cuando los corruptos héroes lo esconden celosamente por sus innovaciones. Pero por allá saldrá en una hora aproximadamente la rata Heim Gyuommoto, uno de los más allegados a Star.

Le picaban las manos de la emoción, ¿Eso podía ser de esa forma? Era la primera vez que dejaría que alguien la ayudase, por fin Aleyn con su actitud boba había conseguido a alguien que según Kim valía la pena conservar como aliado. El arma de aquella mujer lucía como un paraguas simple, no quería depender de su habilidad de copiar otros poderes a lo cuál se atenia solo a ese paraguas con una punta afilada y casi indestructible por la fabricación especial que tuvo. Ahí en la azotea de ese edificio esperaban frente a una estancia de cortesanas, sabía que es estúpido saldría pronto ebrio, sería la perfecta oportunidad para atacar.

─ Siempre que necesites mi ayuda, puedo acompañarte, después se todo, algo de acción para mi espada no viene nada mal. Aplastemos a ese tal Star... te ayudo ─

— Joh, Izuminokami. . . Que interesante, no sabía que iba a venir el único cercano a Aly a quien yo le tengo respeto, ¿Vienes a ayudar a eliminar a la escoria de Star?

─ ¿A quién vamos a eliminar esta noche? ─