Extraño que lo diga ya que cada una esta bajo la misma cantidad de luz pero es verdad lo llama brillan por su mismas es como las personas que las adquieren, a veces solo necesitas que la persona correcta te mire para brillar con tu verdadera fuerza.

Todos mis precios son negociables, solo es cuestión de que me diga que le gusta y yo pondré un precio adecuado para ambos

— Cerró los ojos un momento escuchando la respuesta del joven mientras se acercaba a las vitrinas para ver las otras joyas. —

No me mal entienda... la tienda es realmente hermosa y acogedora cada joya creada se ve que a sido tratada con cariño y delicadeza al ser montada. Pero pienso que las luces hacen brillar a unas mas que otras. Las joyas son las hijas del artesano que resplandecen por si mismas segun la consciencia y cariño con la que fueron creadas. Los detalles que ud a logrado hacer son maravillosos en verdad.

— Volteó y dedico una ligera sonrisa al artesano mientras veia un colgante de rubi. —

¿Cual es el precio que pide por alguna de sus creaciones?

Yo hago los diseños y si soy el artesano principal, tengo un hombre que me ayuda.

Es Oro blanco y amarillo señorita, el precio aumenta solo si el trabajo no es bien valorado y solo comprado por mera vanidad.


¿Qué piensa que falta?

Muchas gracias es muy amable. Todas las joyas que hay en la vitrina son hermosas, se ve que su creador pone sentimientos al crearlas. Se ve en el brazalete... si se ve de lejos pareciera que la pulsera es de tiras rojas y blancas pero a detalle cada una posee 4 piezas de gemas... aunque el hilo dorado... quizás hubiera combinado mas con plata u oro blanco aunque eso seguro aumentará mas el precio... bueno no se de joyas creo que mejor no debo opinar mucho...

—Comentó la joven con una suave sonrisa. Acepto la invitación del hombre y entro en la tienda para apreciar mas de cerca la joyería. La tienda era bastante bella y bien iluminada aunque sentía que algo faltaba por lo que ladea la cabeza con levedad algo pensativa.—

Esta tienda posee creaciones hermosas... pero siento que algo falta...

Seria un honor pasar a ver sus creaciones, me encanta el detalle con que trabaja los metales y las gemas.

— Sonrió ampliamente para entrar a aquella tienda la cual resplandecia y ponia en valor cada gema y pieza de joyeria pes las luces estaban colocadas para hacer que cada pieza brillará por su propia fuerza. —

¿Es usted el único artesano de tan exquizitas piezas? Cada una esta tan finamente terminada... aun viendo aquel brazalete si uno no ve bien los cortes pensaría que el brazalete en si es de dos colores cuando cada corte rojo posee 4 rubies y el blanco 4 brillantes sin contar la hilera de pequeños brillantes que la rodea la pieza blanca...

Siempre p do dar un buen precio a quien como usted aprecia cada detalle de mi trabajo, pase, es bienvenida

- sonrió con amabilidad indicándole con un gesto de diestra que podía entrar-

— Al escuchar una voz y la puesta de la joria abrirse voltea su mirada con un leve rubor mirando de su interlocutor al brazalete. —

Me encantaría... pero no tengo demsiado dinero y su joyeria es exquisita, seguramente el precio debe costar todos mis organos si esque les saco buen precio en el mercado negro.

— Bromeó divertida voltear a ver aquel brazalete. —

Cada detalle lo hace perfecto, la simplicidad de sus colores y la forma en que a sido creado. Sobre todo porque la forma del corazon no es exagerada y los brillantes que envuelven al rubi le dan su toque de elegancia.

-Como era costumbre miraba a los clientes a cualquiera que pasara frente a la joyería, disfrutaba de su cara al ver su creaciones, abrió la puerta y miro a la joven dama con una sonrisa en los labios-

Buen día señorita, le gustaría entrar, tenemos cosas igual de bellas que ese brazalete o podría probarselo si desea.

Waaaa que hermoso!! — Mencionó al pasar frente a una joyeria viendo un brazalete que llamó su atención. — Sublime... discreto y detallado... lo mejor es que no es demasiado vistoso... pero debe ser caro... — Suspiro mirando las demas joyas que se veían bastante finas pero ninguna otra llamo su atención. —