AlbedoDemon

Era conocido entre los demonios, su presencia era una interrogante. No se solía ver en compañía de otros demonios. El solo hecho de la presencia de aquel ser aterrorizaba a los mismos diablos, duques y reyes del infierno.

Su existencia era tan antigua, siendo poseedor de todos los secretos de la humanidad, del delirio y la muerte. Varias leyendas rodean la enigmática vida. Más es sabio y comprende, conoce y sabe todo lo que se habla de él.

Al ser un ser extremadamente "perfecto" para la vista de los otros, opto por tomar una forma humana, haciendo burla esta. Pero sabe de sobra que su aspecto inocente cubre a la perfección al ser malvado que en el habita.

Su nombre exacto es desconocido, pero aquellos que los conocen lo llaman como "Memonch" el diablo.

Su silueta fue vista recorriendo los senderos de la noche hasta la llegar a los aposentos, donde aquella demonesa habitaba, intrigado por sus actos en el mundo de los humanos, más que curioso.

Al ser uno de los antiguos su entrada no fue anunciada, ni necesito presentación. El ambiente se oscureció y de la pared emergió una sombra, una criatura enorme de más de dos metros de altura, con cuernos, patas de cabra y los ojos rojos se materializo y al tiempo que avanza su voz retumbó en los aposentos


Si bien Memnoch ya había atravesado la habitación envuelto en un sombra, a la luz dejo ver su aspecto "formal", invitando a la demonio acercase al extender su mano para presentar sus respetos.

¿Se te olvida ahora tu trabajo?

-Pregunta sarcástico-

La lista de humanos de quienes te debes llevar tu y los tuyos al infierno

Al fin te veo albedo

Estaba pensando en comer algo frito O tal vez algo Oriental no sé tú qué dices

Dile a Leviatan que se ocupe de su vida en vez de estar pendiente de lo que hago ¿O acaso no tienen nada que hacer en el infierno? y en tal caso que quiera decirme algo, que no te use de mensajera y venga el mismo por su cuenta

-Le guiña a la demonio para darle la espalda por momentos, busca un pergamino en su escritorio, se devuelve a ella y se lo entrega en la mano-

La lista negra de ustedes... ya que viniste, aprovecho para dártela.

-El arcángel da una risa vacilante "Estos demonios son verdaderamente increíble"-

Cuando se suele desconocer es cuando se vuelve uno mas ignorante, pero dado a que solo haz escuchado rumores de mí, supongo que no sabes muy bien mi cargo. No importa, ¿Inmundo, lo dice un demonio en tierras santas? creo que la que esta desubicada es otra por aquí... de igual forma ¿Qué se le ofrece?

-El arcángel estaba bastante tranquilo, de hecho tenía mucho trabajo como para ponerse a discutir con aquél ser, sin embargo le quiso atender a sus necesidades-

Anda, anda vamos a comer algo de los humanos...ya tengo hambre...sin energía no puedo hacer nada uwu

Terminarán aquellos que no son capaces de ver la pureza y belleza en la realidad del mundo...
Solo los leales a Dios estarán fuertes y seguros de la salvación

Espero no incomodarle... solo he sentido su presencia y me ha llamado la atención...

*dijo estando a una distancia prudente* Creo que ha sido casualidad, recorría los jardines del área neutral y le he sentido.

Siempre he dicho que la belleza de un demonio es superior a la de los ángeles, sin hacer de menos a los míos

*comento aquel ángel desterrado acercandose a la demonio a quien se había topado en su paseo nocturno*