— E-eh ¿Riku? ¿En serio te la tienes que pasar desnuda todo el tiempo? — No era como si él fuese demasiado pudoroso dentro de su guarida, pero a diferencia de su esposa sabía cuando y cómo mostrarse de ese modo.
— ¿Eti...queta? — Cuestiono un tanto confundida, pero mostrando la mayor atención posible a cada una de sus palabras. Le parecía verdaderamente extraño que algunos se vistieran por algo, o alguien llamado "Etiqueta". Si bien era una figura cósmica, cuyo objetivo era establecer los parámetros del bien y el mal en cualquier plano, aun desconocía muchos conceptos específicos de cada civilización. De todas formas, no era alguien que disfrutara incomodar a sus seres cercanos, por lo que en cuestión de un instante hizo aparecer un yukata abierto; tratando de llegar a un punto medio donde no fuera en contra de los principios de Alastair, y al mismo tiempo, ella no se sintiera tan incomoda. — Descuida, descuida. No disfruto usar algo encima, pero... ¡Hare lo posible para adaptarme a ello! La etiqueta estará satisfecha. — Expreso con alegría.
