— Se acercó a este tomando su mano con suma suavidad apretando la misma un poco en el proceso, se acercó a él brindando un beso en aquellos labios, unos cuantos, no quería alejarse de este nunca en la vida, solo pudo apoyar su mejilla en el pecho de este disfrutando del momento.

-.Fue en ese momento donde cayó en cuenta todo lo que había ocurrido en ese momento, la manera en la cual se la había pasado de un lado a otro en el hospital preguntando por su pareja, la manera en la cual no se había despegado ni un solo instante de ella, fue entonces, que sabía que debía dar ese paso.-

No...no suena mal...es lo más maravilloso que podría pasarme y prometo...que todo estará bien...

— En todo el proceso dijiste mi esposa, mi esposa.... Estabas un poco nervioso, ya tenemos un bebé, creo que sería bueno tomar ese camino, tu esposa no suena mal — Dijo sonriente cubriendo a la perfección el pequeño cuerpo que ahora dormitaba en sus brazos, no quería que este se enfermara por lo cual aquella manta gruesa ayudaría a mantenerle caliente.

-.El chico se quedó completamente inmóvil, casi petrificado si no fuese por que tras escuchar las palabras de la dama, reaccionaría unos cuantos segundos después, su rostro comenzó a tomar un color bastante rojizo y en su ser, comenzó a invadirlo una gran alegría.-

¿E-estas hablando en serio Anohis...?

— Mi novio es hermoso, aunque en pleno parto me declaró oficialmente su esposa....