« Back to Album · Next »
This page is a permanent link to the comment below. See all comments »
A prisa se asomó a la habitación de los gemelos y al verlos llorar, una pequeña gota de sudor rodó por su sien. Con suavidad cargó a ambos y los meció con lentitud tratando de calmar el llanto de los bebés.

— Tranquilos, no pasa nada. Mamá está aquí. No tienen porque llorar, nadie les va a hacer daño.
 
Send Comment

Add a comment...
 
Send Comment