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AS1580118 · M
» — Obi Wan está equivocado. Lo que estoy haciendo es por nosotros, por nuestro hijo. Ahora mismo soy el ser más fuerte en todo el universo. Con este nuevo poder podré derrotar al Emperador. Tú y yo gobernaremos la galaxia, podremos imponer nuestras ideas a lo largo del universo y hacer lo que nos plazca. — Una nueva luz de esperanza y superficial alegría se asomó en las facciones de Skywalker tras una corta pausa.
— Seremos libres como nunca antes lo fuimos. Lo que te haya dicho Obi Wan no es cierto. Él quiere que me odies...—
Entonces, el Elegido de la fuerza calló, adoptando un semblante horrido y de mucho dolor. — A menos que... estés de su lado. —
— Seremos libres como nunca antes lo fuimos. Lo que te haya dicho Obi Wan no es cierto. Él quiere que me odies...—
Entonces, el Elegido de la fuerza calló, adoptando un semblante horrido y de mucho dolor. — A menos que... estés de su lado. —
AS1580118 · M
La chispa de emoción que inundaba la mirada de Anakin desapareció conforme iba sintiendo a Padmé alejarse de una manera que no podía describir más que con el triste recuerdo de la despedida de su madre. El joven Skywalker detestaba verse envuelto en esa clase de situaciones donde desconocía cómo actuar ante la ira hirviendo en su fuero interno. Era como estar despertando al monstruo que las enseñanzas de los Jedi intentaron apaciguar y al que, irónicamente, el lado oscuro le invitó a dejar libre.
— ¿Él te lo dijo? ¿Has venido por él? — Bajó los brazos y la soltó sin ternura. Las matices de sus ojos comenzaron a cubrirse de un tono dorado que alcanzó a dormir con un par de parpadeos. — Intenta ponerte en mi contra —
Anakin se convenció de una idea que, según él, era inequívoca. Obi Wan había acudido a Padmé, sabiendo que ella era su debilidad, para que la senadora dejara de amarlo y se opusiera a sus convicciones. »
— ¿Él te lo dijo? ¿Has venido por él? — Bajó los brazos y la soltó sin ternura. Las matices de sus ojos comenzaron a cubrirse de un tono dorado que alcanzó a dormir con un par de parpadeos. — Intenta ponerte en mi contra —
Anakin se convenció de una idea que, según él, era inequívoca. Obi Wan había acudido a Padmé, sabiendo que ella era su debilidad, para que la senadora dejara de amarlo y se opusiera a sus convicciones. »
SW-User
Mantuvo la unión entre ambos, sus manos sujetando los antebrazos de Anakin culminando con su cuestionamiento final, esperando que sus palabras no fuera lo suficientemente afiladas, más no podía soportar más; — Ani. ¿Tú te has unido al lado oscuro?
Obi Wan se enteró de todo y me ha dicho.. — Intentó pasar saliva, su corazón latía tan fuerte que pensó que se saldría de su pecho. — Que has asesinado niños. — Un hilo salió de voz, su iris buscó eclipsarse con el de él.
Obi Wan se enteró de todo y me ha dicho.. — Intentó pasar saliva, su corazón latía tan fuerte que pensó que se saldría de su pecho. — Que has asesinado niños. — Un hilo salió de voz, su iris buscó eclipsarse con el de él.
SW-User
El tacto de Anakin tenía un tinte diferente, algo era abrumador, podía sentir su amor, claro estaba que era aquel que había crecido con el pasar del tiempo y haciendo frente ante la adversidad, ocultos del consejo, ocultos a ojos de cualquiera. Sólo que ahora, se sentía más descontrolado, podía sentir latente un miedo similar al que vivió al verlo en la cumbre del desespero en su rescate en Tatooine por su madre. ¿Será que ese mismo Anakin era el que ahora estaba con ella?
Temía, temía tanto por las acusaciones de Kenobi. Que en su intento de buscar un dejo de esperanza, las palabras solo oprimían más el corazón de la Senadora. Ya bastante era su decepción con la actual situación con la caída de la República.
»
Temía, temía tanto por las acusaciones de Kenobi. Que en su intento de buscar un dejo de esperanza, las palabras solo oprimían más el corazón de la Senadora. Ya bastante era su decepción con la actual situación con la caída de la República.
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AS1580118 · M
» contenerse ni esconder lo que sentía por Padmé lo obligó a tomarla por ambos hombros, sin demasiada fuerza, tenía presente que aún era una mujer frágil que cargaba a su hijo en el vientre.
— Este caos es necesario, viene una nueva era para todos nosotros, algo mejor, estaremos bien, pero ven conmigo. Ya debemos irnos. —
— Este caos es necesario, viene una nueva era para todos nosotros, algo mejor, estaremos bien, pero ven conmigo. Ya debemos irnos. —
AS1580118 · M
Dentro de Anakin se había desatado un encuentro de emociones contrariadas. Estaba la preocupación hacia Padmé y su futuro hijo, la lealtad prometida a Palpatine y la fresca traición a lo que pudo ser el camino de un honrado Jedi. De entre todos los seres vivos que existen en el universo, Anakin presumía un deteriorado manejo emocional que finalmente se atrevía a asomarse entre las grietas de su consciencia. ¿Por cuánto tiempo había sido sometido a reprimir sus emociones con tal de cumplir una profecía? Nadie bajo el manto de los Jedi le aseguraba el bienestar de Padmé y su hijo, pero el lado oscuro de la fuerza le prometía ser libre con ellos. Libre como deseó ser desde la infancia, libre como le hubiera gustado que fuese su madre… Libre al fin.
— Padmé, debes venir conmigo — susurró, dejando en claro la urgencia de llevarla a un ‘nuevo mañana’. Creía firmemente en las palabras de su nuevo maestro, por lo que la emoción de no tener que … »
— Padmé, debes venir conmigo — susurró, dejando en claro la urgencia de llevarla a un ‘nuevo mañana’. Creía firmemente en las palabras de su nuevo maestro, por lo que la emoción de no tener que … »
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— Ani.. — Susurró con preocupación. La mirada del Jedi se había ensombrecido y no sólo por el entorno en el que se encontraban. — Aún podemos irnos, podemos criar a nuestro hijo lejos de este caos. — Suplicó con la esperanza de que pudiera contemplarlo, pues lo dicho por el Maestro Obi Wan repiqueteaba en su mente sembrando duda y confusión en su corazón. Padmé se aferraba a la idea de que aquel que mencionó no era su Anakin. Él sería incapaz de extinguir la vida de infantes, el semblante de la senadora buscaba un hilo de consuelo en la voz adversa afirmando que todo había sido para difamarlo.
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