[code]Asintió con entusiasmo ante su pregunta instantes antes de quejarse —de una manera bastante peculiar— por el golpe. Su rostro enrojecido y el baile involuntario que hacía al apretar sus muslos denotó el origen de su naturaleza pero, sobre todo, indicó lo mucho que Alouqua disfrutaba de las órdenes y agresiones que Aleksandr le daba. ¡Ah! Hacía tanto que un hombre no le provocaba ese cosquilleo descarado en el bajo viente; no debió haberlo dejado morir nunca. Cuánto tiempo desperdiciado. —L-lo que ordenes. —murmuró, alentando adrede su paso para sentir el intoxicante dolor de su brazo al ser tironeado y, con suerte, molestar un poco a Aleksandr, con la intención de que este se desquitara de maneras más severas con ella. Alouqua podía ser la poderosa reina de los vampiros, pero con él era una esclava más del masoquismo puro. [/code]
[code]De un momento a otro, su pecho se inundó en una frágil melancolía; todo producto del demonio. Sí, justamente esa minucia tan notable en la pequeña desembocó aquellos recuerdos que tenía almacenados en su memoria. Exhaló con pesadez, ocultando su sentimiento para ahogarlo en una expresión atrevida y realzada en su picardía.─ Ya sabes como tienes que estar para pedirme alimento.
Murmuró, completamente suave y apagado, delineando sus palabras con un aire sarcásticamente seco.─ Te noto más encimada que de costumbre. ¿Tanto me extrañaste? ─inquirió con una curva en sus labios, bajándola de manera abrupta para dar un golpe sobre la frente ajena, dejando que su dedo propinara dicha agresión.─ Andando, Lou. Provocaste una necesidad por refrescar tus suplicas y lamentos. ─la tomó de la muñeca y tiró de ella con fuerza, iniciando ese impuro juego entre ellos.[/code]
[code]Sabía que podía contar contigo, jamás me decepcionas... En ningún sentido. —se dispuso a reír, pero él acortó la distancia y la levantó cual si Alouqua fuese una muñeca de trapo. Su corazón silente se desbocó al tenerlo tan cerca como si este fuese a saltar de su pecho; sin embargo, no pudo desaprovechar la oportunidad y le rodeó el cuello con los brazos de manera cuidadosa, ya que aún sostenía su martillo y estaca.— T-tan juntos que no me dejes espacio para respirar, como cuando te colocabas sobre mí y me asfixiabas... Ngh... Tengo hambre, alimentame por favor. —en su interior moría por gritar de emoción, aunque se contuvo y, en vez de eso, restregó suavemente su mejilla contra la ajena.[/code]
[code]Ah, eso explica la destrucción en los primeros días... Espera, ¿por qué carajos me quieren? Olvídalo, no quiero saberlo... Tan solo sigue contándome los sucesos de ese lado y yo me encargaré de cosechar tu alimento para romper ese sello. ─acortó distancia entre ambos con un paso lento, situándose frente del demonio para tomarla por los costados de la cadera y alzarla con suma facilidad gracias a su pequeño cuerpo.─ Así que, ¿juntos? ¿Qué tan juntos, Lou? ~[/code]
[code]¡No! Jamás debe verte. Está esperando su oportunidad para reclamarte, siendo que no pudo hacerse de ti la última vez que moriste. Tal vez no lo sabías pero eres codiciado en el infierno. No toleraría perderte entre sus garras y tener que volver a usar insulsos humanos para mí alimentación. Ugh, tiemblo de sólo pensar en ello... Sin embargo, si logro liberar el sello que me puso podremos derrotarlo... J-juntos. [/code]
[code]Exactamente esos días... Día y noche alimentándote, en más de un sentido. Por eso me extrañó despertar y no verte encima de mí aprovechándote. Imagino que sucedió algo, pero después me contarás entre tus lindos lloriqueos.
Ah, joder... Había olvidado a tu amigo del alma. ¿Y si mejor le meto una bala en la frente? Sé que no morirá, pero nos quedaremos a gusto. [/code]
[code]¡Aaaah! Los buenos días antes de tu muerte, donde solamente tú podías resistir pasar la noche conmigo. Enredados en la cama, jadeantes y sudorosos... N-nggggh... Ejem.
Sigue vigente. Tu ausencia ha hecho que mi recolección se retrase. Lucifer, ese bastardo, cree que me ha podido sellar para siempre. No sabe que te tengo a ti; mi arma secreta. ~[/code]
[code]¿Distraerte? Pero yo no he dicho nada, aún. No es como que te esté recordando esos días donde no había cama que resistiera tanto salto, pero mejor cuéntame. ¿Sigue vigente nuestro contrato? [/code]
[code]¡No! Los tratos conmigo duran por toda la e... ¿R-romper?, ¿c-cosas? Mmmff... Sí, sí. ¡No!, ¡no me distraigas! Yo, trato, sí, trato. ¡Un trato no se rompe! Pero puedes romperme a mí en el proceso de su cumplimiento. ~[/code]
