¿En qué momento habían pasado de hablar acerca de Ahri y la voz de Akali a esto?, Cuando sujetó su mano se percató de lo suaves que eran, miró al frente como si eso pudiera ocultar la emoción en sus ojos por sentir un tacto así después de tanto tiempo. —Por suerte la arena ya no está tan caliente...— Akali había hecho lo mismo, dejar su calzado, su chaqueta quedando solamente en ropa ligera. Se detuvo frente al mar, dónde las olas se rompían salpicando los pies de las jóvenes. Akali liberó la mano de Seraphine y avanzó un poco más para mojar sus pies hasta sus tobillos. — Necesitaba esto...— cerró sus ojos, era realmente relajante.
Casi por inercia hizo lo que Akali le decía, se escuchaba un tanto imponente y autoritaria... o quizás era esa vibra de chica mala, pero cuando se dio cuenta, ya había colocado sus zapatos, muy acomodados sobre el asiento de la motocicleta. Movió los dedos de sus pies, sintiendo como se enterraban en la arena. —Esto se siente bien...— Oh Dios... Akali estaba ofreciéndole su mano. Sintió que se ponía helada e incluso temblaba un poco mientras acercaba la propia, sujetando la de ella suavemente. —S-Si...— Dijo en un murmullo.
Había escuchado a Seraphine cantar, por supuesto que no en vivo pero no tenía manera de describir lo que su voz le hacía sentir. Akali respiró profundamente y aseguró la motocicleta antes de comenzar a quitarse el calzado y su chaqueta. -Quítate tus zapatos, siente la arena, caminemos por la orilla un momento. - Señalo el mar, la había llevado hasta ahí sin pensar realmente el porque, quería suponer que lo necesitaba. - Estoy segura que te integraras, eres una de nosotras ahora y sea lo que sea estaré ahí para darte empujones para que no retrocedas. Algunas veces solo debes ir por las oportunidades y no dejarlas ir. -Sonrió y comenzó a caminar extendiendo su mano a su acompañante. -¿Vamos? -
—¿De verdad? Espero poder convivir con ellas un poco más... Aún me siento algo...— No encontró la palabra correcta y agachó la mirada, mordiendo ligeramente su labio inferior. La verdad era que ni siquiera habían comenzado las grabaciones y jamás se había sentido tan insegura. ¿Y si las decepcionaba? ¿Y si no resultaba ser lo que Ahri y el resto esperaban de ella? Dio un salto desde la Tierra hasta el espacio en cuestión de semanas y se sentía flotando entre las estrellas... —...Perdona, ni siquiera comprendo como me siento.
No pudo evitar reír un poco por su entusiasmo y además por lo dicho acerca de Ahri. Comprendía lo seria que podía ser al respecto y más cuando se trataba del grupo. Pensativa levantó su vista y su diestra a su mentón mientras la zurda permanecía en el bolsillo de su chaqueta. —Ahri puede ser algo estricta, pero un secreto entre las dos es que es más accesible de lo que parece. —Y como muestra de complicidad le guiñó su ojo derecho y se encogió de hombros. —Ya la conocerás, todas tenemos nuestros momentos pero es por su gran trabajo que seguimos adelante todas juntas. — La miró curiosa, podría decirse que Akali era la más cercana a Seraphine, no podía mentir cuando decía que disfrutaba su compañía.
Sus mejillas estaban tan rosadas como su cabello. ¿Podía esa chica dejar de ser genial por dos segundos? No... No quería que dejara de serlo. —Prometo dar mi mejor esfuerzo y... ¡Aaah! Ahri me aterra un poco, ¿Sabes? Fue tan... profesional al hablarme.— Se acercó, colocando ambas manos sobre la moto para apoyarse, y se inclinó hacia ella ligeramente.
Se quita el casco y se recarga en su motocicleta. — ¿Sabes?, Será fantástico cantar contigo. No por nada Ahri te eligió a ti, estoy segura que ha dado en el clavo. —
