No tengo planes aún, no muy establecidos. Llevo poco fuera, no sé muchas cosas, debo adaptarme lo mejor que pueda para ser de ayuda en algo, supongo. ¿Y tú? Además de la guerra claro.
La razón de mi encierro fue buscar ciegamente reconocimiento. Creí que servir a los Titanes sería mi oportunidad de "ser alguien" -Ademán de comillas.- … Pero no contaba con que fueran tan débiles, en aquel entonces. Zeus ordenó que mis alas fueran arrancadas, me arrojó a Tártaro y pasé tanto tiempo en esa celda. ¿Y mi liberación? Todo fue gracias a mi hermana y sus ocurrencias, pero ambas pagamos muy caro, ella fue torturada frente a mis ojos, no pude sentirme más culpable. En fin, hice un trato con una Diosa, mi libertad y la de Iris a cambio de mis servicios. Bonita historia, ¿no te parece?
Incertidumbre a lo interno y externo, miedo al exterior y, peor aún, al propio interior. Haces bien tu trabajo, Phobos, Dios del Pánico. Creí que mi nombre había sido tachado para todos los Dioses, me sorprende que lo sepas.
En eso tienes razón, cuando solo tú puedes verlo es peor ¿No lo crees? Que nadie más sepa que estás cautivo, es un poco aterrador y es eso mismo mi especialidad, una prisión invisible de la que no se puede salir, dónde el miedo a lo que hay dentro es tan grande como lo que hay fuera, Phobos y tú, eres Arce
Ninguno de los dos, no soy enteramente libre, pero tampoco estoy preso, no como tú lo estuviste, esta es más una prisión invisible, puede que sea la peor
