« Back to Album · Next »
 
This page is a permanent link to the comment below. See all comments »
-Incapaz de sostenerle la mirada, la pequeña mira hacia sus propias manos, que nerviosamente juguetean los dedos. Así, asiente y se acaricia el vientre, como siempre que se pone nerviosa o se siente intimidada.- Sí, Mi Señor... Disculpe. ~
 
Send Comment

Add a comment...
 
Send Comment