" Las palabras del Basilio fueron interrumpidas de forma abrupta, casi ahogado por la zandia, mastica mientras sonríe, en la recamara del Rey solo Ana y la hermana del Basilio tienen permiso para ingresar sin avisar, sin ninguno que interrumpa, el varon toma libertad para jugar un poco, come lo mas rapido que puede y retira la cuchara de su boca para regresarla a la Zandia en manos de la joven, provocando aun mas la timidez en ella, se acerca y besa la mejilla de la mujer sin previo aviso "
