*Era una noche apacible en la secta JiXuan, hogar de dos cultivadores que eran dignos emisarios del ying y Yang, pues ambos eran diferentes, pero juntos hacian una perfecta armonia; Xiao Xingchen habia preparado una bella sorpresa para pasear por los jardines de las cuatro estaciones.
*Sobrio un poco emocionado, después sintió los brazos del menor sujetarlo y llevarlo al agua, ahora sus ropas estarían mojadas pero eso no importaba por el momento, solo pensaba en disfrutar y pasar esos momentos juntos, ya habría tiempo de organizar la secta, y hacer deberes*
Es verdad, no podemos pensar en nada más que este momento, seguramente Zhou estará bien, no puedo decir lo mismo por A-Qin y Wen, no les agrada mucho.
