[code]++ Siguió la conversación, atento a las acciones sobre aquel barbudo. Desde el inicio había captado la presencia de Adhara, más había prevenido su ingreso, no por ignorarla, sino porque cualquier movimiento brusco podía darle la oportunidad al objetivo de escapar.

Discretamente éste había retirado el seguro de la ventana, ya que ventajosamente empleaba un mecanismo de hierro y aluminio para desbloquearla con un pequeño movimiento de sus dedos y dejarle entrar con facilidad; un acto que pasaría desapercibido, pues éste lo habría ejecutado durante su conversación.

― Mientras sigan sueltos, no puede haber tranquilidad.

Y con un chasquido de sus dedos, fue suficiente para controlar el metal de aquella silla y usar el mismo hierro para aprisionar aquel hombre en su propio asiento, permitiéndo su bebida. ++ [/code]