* Claramente Arien sentía como la desesperación embargaba todo su ser, se preguntaba si ese sería su trágico fin ¿Acaso no merecía un final feliz? las lágrimas brotaron de sus ojos, inundando su rostro, ya sin esperanza, Arien cayó de rodillas sobre el suelo. De pronto, como un milagro la luz de la luna, tenue emergió de entre las nubes y una voz femenina resonó en la cabeza de ella*

Arien, tu puedes, anda levántate y pelea ....* Entre sus manos apareció un arco y unas flechas, ella seguramente aun no podía entender quién era la mujer que le habló, con el pasó del tiempo podría describir, la verdad de aquel milagro de invierno*.