- Escuchar esas palabras que guardaban cierto desdén en el trasfondo lograron que soltara un suspiro de resignación -

Tal parece que no podremos comprendernos mutuamente pero no puedes culparme por tratar de intentarlo, despues de todo rescatar las almas de los caídos es una de mis tareas pero seguiré manteniendo la fe de que algún día tú y el resto de nuestros hermanos regresen a donde pertenecen, de donde nunca debieron ser expulsados... Pero no te culpa, despues de todo angeles y demonios existimos para guardar el equilibrio de la misma existencia. El libre albedrío es un regalo tan precioso que pocos comprenden Bael, en mi caso puedo entenderlo pues nuestro Padre me confió todos los secretos del universo, y entender este tipo de cosas puede llevar eones... Si tan solo pudieras entender los planes divinos, verías que todo esto sucede por una razón y que tarde o temprano lograrás comprender el horizonte que presencias.