Momo siempre solía ocultar su perversión y fuerza bajo actitudes frágiles y refinadas, sin embargo estaba lo más lejos posible de ser una princesa perfecta, desde que la guerra había llegado a su fin en el espacio no tenía mucho que hacer y por ello ahora mismo se encontraba en el planeta Tierra. Su apariencia era frágil y pequeña pero poseía fuerza sobre humana y un jardín botánico en un espacio digital sumamente letal, poseía plantas para toda ocasión y como cualquier Deviluke una inteligencia técnica la cual le ayudaba en cualquier situación pudiendo hacer reparaciones, modificaciones o inventos complicados.

Y aunque ansiaba conocer al pilar, la doncella inicial del harem no esperaba quedar tan deslumbrada por su belleza, y tampoco estaba segura de si debía mostrar su verdadera naturaleza o era pronto para ello, pero el simple hecho de observarla he imaginarla entre los brazos de Zoro le producía un dulce sentimiento de excitación,[/code]