Al ver como se recostaba sonrió y su corazón latió fuertemente. Recordando todas las veces que tuvo sus solitarias noches de pasión en aquel ligar mientras respiraba el ahorma que contenía aquel mueble pasa ayudar a tener una fantasía mucho más clara.

-Me hace realmente feliz que te acuestes en tu sofá.

Dijo mientras se ponía algo roja por la excitación que comenzaba a llenarla pues imagino al chico lamiendo su sofá después de decirle lo que había hecho.

-Veras me masturbe muchas noche hasta correrme y sude mucho así que ahora me hace muy feliz que te acuestes en ese lugar, ya que estas hay se me antoja tener sexo.

Comenzó a quitarse algunas prendas, para dejas su cuerpo al desnudo, para que el chico contemplara si belleza y al caer con sus encantos para fornicaran hasta el día siguiente. Como fue hace millones de años cuando lo hicieron por ultima vez, estaba realmente con ganas de que el chico la penetrara.