Senchou, como buen cociniero, penso en darle la bienvenida a todos los miembros nuevos de la tripulación con un gran festín. Había manentido todo en secreto, salvo por su ayudante estrella, Belfast, quién le ayudó con los prepaarativos finales para el festín. — ¡A todos lo miembros de la flota!, ¡Vengan, vengan!, tenemos sushi, sopa miso, dangos, onigiris, tonkatsu, parrillada y maricada, ¡Vengan vengan!. —
*Amagi había pasado la mayor parte del día encerrada estudiando nuevas estrategias y formaciones, con un poco de información de cada navío existente, creaba diferentes escenarios donde contemplaba debilidades y fortalezas, así como posibles puntos ciegos que podrían tener tanto ellos como sus enemigos, estaba tan inmersa en su tarea que incluso ignoraba el ligero cansancio físico que comenzaba a sentir, sin embargo, el delicioso olor de la comida entró a la habitación donde se encontraba y con sentidos tan desarrollados como los suyos, inmediatamente sus orejas se pusieron puntiagudas y sus colitas comenzaron a moverse de lado a lado, comenzó a caminar hacia la puerta y al abrirla el aroma fue más claro, había algo delicioso cocinandose, provocando de esta manera que su estómago soltara un fuerte gruñido, el cual intentó disimular un poco con una ligera carraspera de su garganta. —ahem! - Comenzó a caminar hacia el punto de encuentro y después asomó primero sus orejas y después su rost
