- Déjala respirar y pídele su brazo derecho; tómala deo brazo y ella del tuyo, ya con este agarre, frotate con ella, suavesito, que se siente ese beso vaginal e igual, sigue su ritmo pero un poco más rápido para animarla.

El contacto visual es para las más atrevidas, si es un poco tímida, clava la vista en lo que ocurre ahí abajo, ya luego aflojará más. Síguele, cambia la dirección de los Vaivén y comparte los gemidos. En este punto está más vulnerable y puede que parar le moleste un poco, pero tú paras igual, y empieza la manipulación: Hazle sugerencias, como que si le gustaría intentar algo en algún lugar de la casa como la bañera, o convencerla de ir luego por un dildo doble cabeza para experimentar. Si la vez pensativa, mueve las caderas, que la exitación la consuma. Independientemente de su respuesta, sé comprensiva y sigue.

En este punto el sexo puede coger diversos rumbos según como veas el asunto, desde sugerirle un 69, acostarla y hacerla venirse con tu boca y dedos, y