Fuera de todo pronóstico, estaba recibiendo una charla muy informativa respecto a las propiedades del té chino, específicamente del té rojo. Debido a su rutina extenuante en Inazuma, el té rojo era una opción maravillosa de adquirir tomando en cuenta lo que explicaba el señor Zhongli con lujo de detalles. Lo mejor de todo es que la conversación no se quedaba ahí, aquel hombre era como una enciclopedia en persona.
No solamente le estaba hablando de los beneficios del té, también estaba empezando un relato sobre datos realmente interesantes sobre la historia del té y sus evoluciones, quién diría que de ser considerado como medicina en sus inicios, con el paso del tiempo se convertiría en una bebida muy solicitada en las reuniones importantes para amenizar las conversaciones entre los invitados, incluso llegó a ser más valorado que el mismo vino.
