-Le llenaba de orgullo escucharle llamarle "Padre". Cuando años atrás le habían dado la noticia, le asustaba no poder desempeñar dicho papel, pero ver que Roxxas crecía feliz y con honor, le demostraba que tan mal no lo estaba haciendo (?).

—Debo advertirte que más allá de las montañas hay bestias salvajes que a veces se aventuran a acercarse a los bosques en busca de alimento, así que no debemos distraernos. ¿De acuerdo?—Dio una palmada en el hombro al muchacho mientras se acercaban al puente que atravesaba el río que rodeaba el palacio y les llevaría a la zona espesa del bosque.-

—No tendrás mis genes, pero te enseñaré a cazar como un lycan.—