Llegó corriendo porque pensó que se le hacía tarde. Cuando vislumbró el gran libro donde le dijeron que tenía que ejercer su voto, tomó un instante para descansar y recuperar el aire.

¡Lo logré! -Exclamó mirando la hora. Frotó sus manos con emoción infantil, acercándose al libro, con los ojos ya fijados en su elegido. La verdad es que escuchó de ese chico primero por boca ajena. Al inicio le dio miedo porque él es un humano y de pronto se vio involucrado con ángeles y demonios... No gritó por ayuda por no verse cobarde, pero el pelirrojo resultó ser amable y divertido.

¡Kiria Takashi! -Volvió a exclamar, animoso, escribiendo en grande el nombre de su candidato. A parte de su voto, dejó un recado para el chico.- P.D: Si ganas, prometo cocinarte algo.