Te esperé un millón de años a que sintieses el llamado de nuestras almas a evocar un silente acto de divinidad. Dios nos creó para existir por él en amor.
[code]Vimos lo muerto cobrar vida. Suspiramos entre lágrimas, cuales parecían fragmentos de alma caer como esperanzas perdidas.
Yo era una muñeca llena de morfina, no estaba lista para amar, amé y erré y dañé y fui dañada, me rompí con un golpe y no pude devolver el golpe pues estaba inservible.
Poco a poco reanimaste mi corazón, tu boca respiró sobre la mía y mi lamento silente se hizo vida, juntaste las partes y ahora, yo vivo de cada beso, pero también vivo de tu mirada, vivo de mi sueños y pesadillas contigo. Tu estas en el bien y en el mal, tú estás en todo y tú estás dentro de mi, y sacaste todo lo que no eras tú, . . .yo verdaderamente estoy ¿solo llena de ti? transición extraña, compleja, divina, perpetua.[/code]
