En un mundo donde todo parece estar lleno de problemas, y misterios; incluyendo la existencia de cada uno como individuo. Parecía haber una especie de complicidad entre el universo y el destino. R-7, una mujer criada en Night City trataba de hallar el propósito de su misma existencia a través de las experiencias de vida; y aunque esto pareciera algo sencillo, vaya que a ella le resultaba más complicado de la cuenta. Afligida por pensar que era la única en pasar por ello, su compañero de “trabajos” la invito a acercarse un poco más a otras personas conocidas en el área. (...)
Observando atentamente a aquel joven quien tenía el propósito de acompañarla aquella noche, asintió con la cabeza con un rostro un tanto cabizbajo. Tomando su vaso entre sus manos, y jugueteando con el mismo, bajo la mirada hacia la mesa, divagando así un poco en sus memorias.
━━ Agradezco mucho tu compañía, Allen-san. Lamento si no estás divirtiéndote mucho en esta salida; suelo disfrutar los paseos en la ciudad, pero la convivencia en un entorno como este, me resulta… Extraña. ━━ Diría de manera insegura, mientras volteaba a ver aquel joven para aprender un poco del cómo actuar en un torno como en el que estaban en ese instante. ━━ Pero veo que tú te acoplas fácilmente, eso es increíble. Dime Allen-san, ¿Sueles venir aquí con amigos? ━━ Pregunto, tratando quizá de entablar alguna conversación, y así distraerse del entorno que le rodeaba. (…)
