que se hicieron pesados, abriendo la boca finalmente y dejar que la profundidad del agua le bendijera, mordiendo su boca con autoridad y hundir sus pequeños colmillos en sus labios haciendo que estos sangraran un poco y tomarlo como reclamo para deleitarlo con la acuática magia de poder caminar y volar libremente con ella en este momento único, la joven salmón al igual que el agua tenia un carácter moldeable que la hacia mas embravecida y traviesa en su territorio, abrió los ojos tras terminar la ofrenda y ir separándose lentamente y agarrarle la mano mientras le dejo sumirse en un mundo zafiro repleto de pinceladas de color y ir sumergiéndose lentamente para que no padeciera la descomprensión.-
