Ejejeje...es que... -Suspira con cierta pesadez, si seguía así nunca iba a lograr nada, por lo cual, respira hondo para tranquilizarse y luego mirar fijamente a la joven, frunció un poco su entrecejo para según él ganar un poco mas de confianza-
Nanami, me preguntaba si...quisieras ser...¿mi novia?
-Se sonroja completamente y desvía la mirada, mientras que saca la diestra de su espalda para entregar una rosa roja a la joven para agrandar un poco el detalle-