Pues lamento contradecirte Zesta pero yo no soy como las demás mujerzuelas o pueblerinas que hayas conocido, me importa bien poco quien me pretenda sino está a mi altura o como mínimo tiene alguna titulación mágica no me agrada para nada


—Mencionó soltando una carcajada como si de una chica de la nobleza se tratara mientras sus orbes se volvían pequeños debido a su peculiar risa

Lo dices en serio, pero que tenía ese chico que las volvía tan frenéticas? No lo logro comprender con exactitud, me parece una estupidez seguir a un idiota que según él se las da de guapo y fuerte, Ja es tan ridículo

—Proclamó la demonio mientras se burlaba de aquel desconocido mientras se le caía la baba sin darse cuenta tras ver tanta apetitosa comida frente a sus ojos

Te lo agradezco en demasía, pero tranquilo yo nunca seré como las demás no tengo tiempo que malgastar en amoríos