-Francamente, la peliroja se encontraba en un estado muy vulnerable, pero si encontraba el menor atisbo de imprudencia, a la más mínima existencia de amenaza, ella reaccionaría como podía, y fue que, repentinamente se volteó al tocar las puertas, inspiró, la gran presencia de un dragón, sí, estaba cerca. Ella acercó el puño cerrado sobre su pecho-
No te dejaré escapar esta vez, Valgarv.
-Recolectó un resto de energía, en dirección a la presencia, mientras veía una silueta divisarse a lo lejos, acercandose mas a su campo visual con el transcurrir de los segundos.- Y si es alguien diferente, pagará y morirá por culpa de ese maldito dragón!
¡FIRE BALL!-Arrasó con algunos árboles a su paso, disparando en dirección hacia su enemigo, tratando de extinguirlo de un solo disparo.-